Pegaso

De acuerdo a la mitología griega Pegaso nació de la sangre derramada de Medusa, luego de ser decapitada. Era un caballo alado que muchos querían tener, pero solo Belerofonte, Príncipe de Corinto, logró domesticarlo y tras fracasar en el intento de llegar al Olimpo para convertirse en dios, Pegaso fue recuperado por Zeus quedando como su ayudante para enviar sus rayos. Por ello fue premiado al convertirlo en la constelación Pegaso.